domingo, 25 de abril de 2010

LOS RETOS DE LA POLITICA AMBIENTAL EN MÉXICO

Por: Edgar Carlos García Maya
A lo largo de los años, la preocupación por el medio ambiente ha crecido, el calentamiento global, el derretimiento de los polos, los ríos contaminados, los fríos y lluvias más intensos, calor extremo en lugares templados, erosión entre muchos otros problemas han causado que  la sociedad empiece a preguntarse qué será de nosotros en 10 años. Algunos países, incluido México, ha creado legislación en materia ambiental como lo son leyes, normas y firma de tratados internacionales, los cuales tienen como objetivo reducir la cantidad de contaminantes a la atmosfera, agua y suelo, o en el peor de los casos remediar el daño ya hecho .  México es uno de los países que más acuerdos ha firmado, de los cuales nunca se han escuchado resultados concretos acerca de los objetivos planteados hacia la contaminación.
Vemos a través de los medios de comunicación que se va construir el colector oriente, esta obra que costara miles de millones de pesos y resolverá un problema de las inundaciones en el Distrito Federal, pero, ¿cuánto tiempo va a funcionar? La cultura de la basura en México es poca, así que mientras se siga tirando las 12,500 toneladas diarias de basura , se sigan vertiendo los desechos al suelo, coladeras, canales, sitios clandestinos y no exista una cultura de reciclaje, ningún colector de lluvias va a funcionar mucho tiempo antes de que se tape con basura.
Pero, ¿de dónde se origina este problema?, es obvio que la política ambiental no funciona del todo en México, no existe una legislación lo suficientemente fuerte para que las leyes se cumplan al pie de la letra, aunque si a esto aumentamos el hecho de existen muchas incongruencias dentro de éstas que no permiten que la normatividad se lleve a cabo se manera eficiente. Un ejemplo de esto es el artículo 7° de la ley de residuos sólidos del Distrito Federal el cual nos dice cual es la función del gobierno  con respecto a los residuos generados:
“ Planear, organizar, normar, controlar y vigilar la prestación del servicio público de  limpia en sus etapas de barrido y recolección en vías primarias, transferencia, tratamiento y disposición final de los residuos sólido”;
Este artículo faculta a las autoridades a sancionar a las personas que no acaten las leyes existentes, pero la mayoría de las veces no se hace nada al respecto al fin y al cabo “solo es basura”, y así, la cadena de corrupción e ignorancia nunca termina.
La creación de comités para discutir la legislación existente con gente especializada en materia ambiental, hará que dicha legislación deje de ser utópica y aterrice en los verdaderos problemas.
Otro de los retos,  a mi modo de pensar,  como el más grande a vencer, es la cultura  que como adultos es difícil de cambiar  pero a través de fuertes campañas en los medios de comunicación, conciencia y mejoras en la educación (en nivel   básico sólo se incluyen en los libros de texto, dos páginas dedicadas a la ecología) podremos crear una cultura ambiental efectiva que nos lleve a crear leyes que de verdad se cumplan, con  objetivos bien planteados y lo más importante, no dejar los problemas ambientales en último término, los problemas ambientales ya nos están afectando, estamos sufriendo las consecuencias de los errores cometidos por nosotros mismos. Es importante aplicar las campañas existentes, el acopio de pilas, celulares viejos, reciclaje de PET, y así aunque nos parezca que hacemos poco, estamos ayudando al planeta y a contagiar a más gente de que el cuidarlo vale la pena.